Honduras

Los caficultores hondureños siguen prácticas de cultivo tradicionales y sostenibles. El café se cultiva a altitudes que van desde los 1,000 hasta los 1,800 metros sobre el nivel del mar, en fincas de pequeños productores que preservan la biodiversidad local y utilizan métodos orgánicos o con mínima intervención química. El proceso de recolección es manual, asegurando que solo las cerezas más maduras y de mejor calidad sean seleccionadas para la producción. Después de la cosecha, el café se procesa principalmente mediante el método de lavado, aunque también es común encontrar métodos naturales y honey que aportan diferentes perfiles de sabor.

Notas de Cata del Café de Honduras

El café de Honduras se distingue por sus perfiles de sabor equilibrados y complejos. Las notas de cata suelen incluir sabores frutales como frutos rojos, cítricos y melocotón, junto con matices de caramelo, miel y chocolate. Su acidez es brillante y cítrica, pero bien balanceada con un cuerpo medio a pleno, lo que lo convierte en una opción versátil tanto para métodos de extracción como espresso, pour over, prensa francesa, entre otros.

Cada taza de café de Honduras ofrece una experiencia única que refleja la dedicación de sus productores y las características distintivas de su terroir. Ya sea que prefieras un café con notas dulces y florales o con matices más profundos de chocolate y especias.

Su alta calidad, sumada a los métodos de cultivo tradicionales y a la pasión de sus productores, lo convierten en una excelente opción para los amantes del café de especialidad que buscan una experiencia auténtica y con propósito.